Herzog & de Meuron
Basilea, 1950
La escena surgió de la conversación durante un amable encuentro gastronómico con Jacques Herzog en Schürmann, Basilea. Entre copas de una excelente cosecha de La Rose se deslizaban las anécdotas de la construcción de las bodegas californianas, y de los pájaros y serpientes que vinieron a morar en los gaviones de piedra que forman la envoltura, verdaderamente extraordinaria, del edificio Dominus. Serpientes, por cierto, de cascabel, rattlesnakes como en las películas del Oeste, que obligaban al arquitecto a rediseñar las cosas.
El personaje de Lucky Luke tiene bastante afinidad con el arquitecto suizo; estambién un francoparlante en tierras del far west, un personaje que arrastra el humor gráfico francés por la llanura seca y con cactus del desierto americano. Y a su vez, el personaje del arquitecto, siempre enjuto, rapado y vestido de riguroso oscuro, apenastenía que disfrazarse para entrar en escena. Para acompañar a Luke y a Herzog, los malos, es decir la banda de los hermanos Dalton, esa especie de apandadores, hacen su papel y roban algunos barriles de la mejor cosecha.
Por su parte, las bodegas Dominus tienen también, en cierto modo, algo de humor francés en suelo indio. El edificio aparece en la viñeta como en una película. Como un decorado, una fachada con sombra detrás que enmarca el paisaje de los cactus. La hermosa muralla de piedras sueltas pero presas en su exacta malla de alambre, escogidas y enjauladas como pollos, es la base del dibujo. Tuve que dibujar cientos de ellas, pero valía la pena el homenaje. La piedra de Dominus es parte de un diseño extraordinario y muy hermoso, especialmente escogida en su tamaño, su forma angulosa y su deliberado ahuecamiento... Con tanta piedra, el chiste de pierre... de Meuron era bastante fácil.
El edificio americano era mucho más escenográfico para una viñeta que los de piel de vidrio, aunque éstos formen el grueso de la obra más conocida de H&deM. Más vigoroso y más extravagante. Y su emplazamiento en la llanura californiana decidió su elección. Aunque también existió algún apunte de historieta de Jacques Herzog con Zig y Puce en los almacenes de caramelos de Ricola, el vaquero Lucky Luke levantó el puesto sin discusión.