La presencia mediática de Ai Weiwei es tal, que el número de entradas que aparecen en Google al teclear su nombre supera en un 35% a la suma de las generadas por los nombres de los seis últimos arquitectos Pritzker. A pesar de ello, poco se conoce de la producción arquitectónica de este multifacético activista chino, y es precisamente este el campo en el que se centra la presente publicación.
Arquitecto autodidacta, funda en 2003 FAKE Design, estudio desde el que desarrolla una prolija carrera de proyectos dispares, construidos fundamentalmente en China, que comparten el saber hacer de la construcción tradicional con la simplicidad y la economía de medios. Las treinta obras y proyectos incluidos en la monografía se ordenan cronológicamente, presentándose a través de un breve texto, varias fotografías y pocos planos. Una pequeña ficha técnica, que incluye datos como superficie construida, fechas de proyecto y obra, permite hacerse una idea del ritmo vertiginoso de su construcción.
Cabe destacar el carácter políglota del volumen, presentado en seis idiomas —inglés, alemán, español, francés, italiano y chino—, con un gran esfuerzo de traducción, pese a que la edición de la parte española presenta expresiones poco acertadas y numerosas erratas.
