Madrid, España
El acceso se produce a nivel de calle, atravesando una membrana permeable que recubre un atrio donde se aglutinan el espacio de acogida y las circulaciones; la propuesta se completa con una sala expositiva en el ático.
El volumen del edificio está compuesto por secciones elipsoidales, formas que remiten al movimiento continuo del cosmos. La fachada está formada por una piel doble: la interior, de vidrio, constituye el cerramiento de cada planta; la exterior es una