A Francisco Juan Barba Corsini (Tarragona, 1916) se le presentó la oportunidad de construir el edificio Mitre de Barcelona por unas viviendas anteriores en la calle Tavern, que habían dejado plenamente satisfechos a sus promotores. El modelo residencial colectivo entonces vigente era la ‘vivienda de renta limitada’, y con el objetivo de mejorar ese estándar ateniéndose a una superficie parecida, Barbá Corsini diseñó una ‘unidad de habitación’, mínima y autosuficiente. El conjunto, que se construyó entre 1959 y 1964, consta de dos bloques paralelos de 11 plantas con 298 viviendas, la mayoría de ellas apartamentos de unos 46 metros cuadrados, en régimen de alquiler, gestionados (todavía hoy) por una administración única y dotados (en su día) de unos servicios comunes (central de calor, aparcamiento, auxiliaría doméstica, lavandería, snack bar, farmacia y guardería), compartidos también por el aparthotel situado en la primera planta, que no funcionó y acabó convertido en despachos.
Este libro, editado por Xavier Monteys y Pere Fuentes, es una crónica con sabor de época de la aventura del proyecto: desde la búsqueda de su emplazamiento en la ronda del General Mitre, por entonces en proceso de urbanización, hasta la campaña publicitaria de promoción. El propio arquitecto relata cómo buscó la seriación constructiva y creó unos espacios flexibles con el mobiliario integrado, la versión catalana de un modelo consagrado, al menos en teoría.
