“Los arquitectos también pueden cometer un crimen de guerra en una mesa de dibujo”. Eyal Weizman lidera el colectivo interdisciplinar Forensic Architecture. Entre el arte y el activismo, trabaja por esclarecer crímenes de Estado y es candidato al Premio Turner.
Su trabajo analiza con la minuciosidad de un forense violaciones de los derechos humanos, actuaciones extrajudiciales u otros hechos acontecidos en la zona oscura de los crímenes de Estado; ya sea la desaparición forzosa de los 43 estudiantes de la Escuela Rural de Ayotzinapa, en Iguala (México); el uso de las armas químicas en Siria; o el asesinato de un palestino beduino que el Gobierno israelí quiso hacer pasar como legítima defensa ante un ataque terrorista...