En 2002 cayó, víctima de aluminosis, el teatro Atlántida de Vic; ocho años después, Josep Llinás, Josep Llobet, Pedro Ayesta y Laia Vives han terminado el nuevo conjunto que lo sustituye, bautizado como Centro de Artes Escénicas de Osona, la comarca catalana cuya capital es Vic. Tres usos principales —un teatro de 800 plazas, un auditorio de entre 275 y 380 localidades y una escuela de música— comparten cubierta poliédrica de zinc y paredes de chapa de latón brillante color oro. El volumen de la caja escénica del teatro remata el crescendo de superficies trianguladas que logran encajar el edificio en una trama de transición entre el casco consolidado y los nuevos crecimientos de borde.