Fruto de la colaboración entre los estudios barceloneses liderados por Pau Bajet, Maria Giramé (Bajet Giramé) y Manuel Julià (JAAS), la gradual renovación de este camping, Alfacs, del municipio catalán de Alcanar, en la comarca del Montsiá, se lleva a cabo en actuaciones diversas fragmentadas, facilitando su implementación año tras año, sin interferir en su actividad.

Una calle se abre hacia el mar, dando continuidad a una sinuosa travesía descendente. En este lugar, dos nuevos edificios centrales se anclan sobre muros que escalonan terrazas para campistas, algunas preexistentes y otras añadidas. Uno de los edificios (recepción y tienda) se orienta hacia el acceso, el otro (restaurante) se despliega hacia la orilla. Los escalones y los muros se dilatan en ocasiones para contener los pabellones auxiliares, planteados como discretas crujías infraestructurales que acogen distintas actividades. En esta topografía artificial están dispuestas 24 nuevas cabañas de madera, con envolventes ventiladas de tablones aserrados unidos a exoesqueletos que sirven como porches y soportes para placas fotovoltaicas.

La concatenación de espacios ambiguos que diluyen los límites entre exterior e interior dinamiza este paisaje vacacional construido con piedra local, hormigón erosionado por el agua y bloques prefabricados de tierra compactada. Además, se recupera lo que habría sido una pequeña cala urbanizada y ocupada por parcelas de camping, hace más de cincuenta años, rellenándola con arena y una piscina embebida contra un muro de contención circular, para ofrecer una pequeña playa resguardada del mar.