A la hora de decorar un espacio es importante tomar en cuenta la calidad, características y usos de cada uno de los elementos que compondrán la estancia. En lo que se refiere a la elección de un tipo de suelo, es útil tomar en cuenta una serie de variables antes de su instalación para así elegir el más óptimo. 

En el mercado se pueden encontrar una gran variedad de tipos suelos con diferentes acabados, texturas, usos, calidades y sistemas de instalación. Una opción que se ha vuelto muy popular son los suelos laminados gracias a sus numerosas ventajas. A continuación se dan a conocer algunas de sus características más destacadas:

- Durabilidad: Es resistente a impactos y rayaduras, es una opción excelente para zonas de alto tránsito.

- Instalación sencilla: Se coloca con sistema de clic, sin necesidad de adhesivos. La instalación es rápida y sencilla siendo un valor añadido para las reformas o nuevas construcciones.

- Variedad estética: Disponible en múltiples diseños que imitan madera, piedra y otros materiales.

- Fácil mantenimiento: Resistente a manchas y fácil de limpiar con productos básicos.

- Precio asequible: Generalmente más económico que otros tipos de suelo como la madera natural    o la cerámica.

Variables a considerar para una buena elección del suelo

Entre las variables que hay que considerar para elegir el suelo más adecuado para una vivienda o espacio, es importante tomar en cuenta factores como:

Nivel de tráfico de la zona

El nivel de tráfico de la zona donde se tiene planificado instalar el suelo laminado es de gran relevancia a la hora de seleccionar el tipo de suelo. Para áreas de alto tránsito como pasillos, cocinas o salas de estar, se puede elegir un laminado con un alto índice de resistencia al desgaste, comúnmente clasificado como AC4 o AC5. En el caso de zonas de menor tránsito no se necesitará índices de resistencia tan altos.

Espesor del laminado

Otro aspecto es el espesor del laminado, el grosor influye en su durabilidad y confort. Los suelos laminados varían entre 6 mm y 12 mm. Para un mayor confort y reducción del ruido se recomienda optar por un laminado de al menos 8 mm de grosor.

Existen diferentes acabados que imitan texturas y estilos variados:

- Mate o satinado: Para un aspecto más natural de los suelos.

- Brillante: Ideal para espacios modernos y con buena iluminación.

- Relieve: Proporciona texturas, como puede ser la madera real.

Resistencia al agua

Si se va a instalar el laminado en áreas propensas a la humedad, como cocinas o baños, es fundamental elegir un laminado con resistencia al agua.

Actualmente, muchas de las opciones de suelos laminados ofrecen esta característica protegiendo el suelo de daños causados por el agua. A la hora de seleccionar el más adecuado es importante elegir en base a su funcionalidad para evitar posibles contratiempos.

Color y estilo

El color y el estilo del laminado complementan la decoración del espacio, por lo que es relevante considerar los siguientes puntos:

- Tonos claros: Hacen que las habitaciones pequeñas parezcan más grandes y luminosas.

- Tonos oscuros: Algunos tonos oscuros pueden añadir calidez y un toque elegante a espacios amplios.

- Diseños imitación madera: Ofrecen un aspecto clásico y atemporal.

Garantía y calidad

Optar por marcas reconocidas que ofrezcan garantías extendidas, generalmente entre 15 y 25 años, es indicativa de la confianza del fabricante en la calidad de sus productos.

Instalación y subsuelo

Aunque la instalación del laminado es relativamente sencilla, es crucial preparar adecuadamente el subsuelo. Es necesario asegurarse de que esté limpio, seco y nivelado. Se puede considerar también la instalación de una barrera de vapor y una capa base para mejorar la acústica y el confort.

Elegir el suelo laminado ideal para el hogar implica considerar varios factores, desde el nivel de tráfico hasta el estilo o la resistencia al agua. Al tomar en cuenta dichos factores se podrá hacer una elección más acertada y lograr el carácter deseado.