La artista vallisoletana, que considera el arte como una herramienta para generar estados de alerta, logra el premio dotado con 30.000 euros.
Dora García (Valladolid, 1965) no se ajusta al molde de los protocolos artísticos. Tampoco considera adaptable a su proyecto la idea de artista. Dora García trabaja con lo que ama y en ese territorio caben muchas cosas: poetas, narradores, filósofos, psicoanalistas, performers, gente anónima. Y lo que hace es estudiar eso que le gusta: leer, interpretar, cuestionarse, generar inquietudes compartidas. Dora García es una artista que no necesita el arte exactamente. O sus adornos y convenciones.
Sus propuestas forman parte de las colecciones de algunos de los museos nacionales e internacionales más importantes. Ha participado en la Documenta de Kassel (2012). Ha sido artista seleccionada para intervenir en el Pabellón de España de la Bienal de Venecia (2015). En 2017 expuso en el Reina Sofía y tituló la muestra 'Segunda vez', que remite a un relato del escritor argentino Julio Cortázar. Su trabajo participa igual del vídeo, del dibujo, de la performance y del texto. Son las ideas el pistón primero de sus obras. No el trazo ni el color, sino el concepto. Y a partir de ahí puede suceder cualquier cosa: del teatro al happening y de la danza al biodrama...
El Mundo: El desafío de Dora García, Premio Nacional de Artes Plásticas 2021