Zaha in the Maze
The National Museum of the Arts of the 21st century in Rome
Zaha Hadid ha dejado su firma en Roma. Como un gigantesco graffiti tridimensional, su proyecto para el MAXXI, el Museo Nacional de las Artes del siglo XXI, se desborda en dinámicas bandas horizontales que cruzan la ciudad eterna. Situado en el distrito Flaminio, un barrio de principios del siglo XIX distante aproximadamente un kilómetro hacia el norte de la Porta y la Piazza del Popolo, el nuevo museo incorpora un tercer componente al conjunto cultural configurado por el Palazzetto dello Sport de Pier Luigi Nervi (1957) y el Parco della Musica de Renzo Piano (2002). Aunque en la actualidad el lugar no es tan accesible como el centro de la ciudad, pronto contará con una parada de tranvía y una estación de metro, además de un nuevo puente sobre el Tíber que facilitará el acercamiento al público. El estilo de Hadid supone una ruptura total con los materiales, los colores y las formas de la Roma histórica, y sin embargo, el MAXXI resulta extrañamente contextual, discretamente encajado entre dos calles anodinas sin perturbar el tejido colindante. Sobre el solar se levantaban cuarteles militares; Hadid y su socio han mantenido uno de los edificios originales, flanqueándolo con potentes protuberancias de hormigón que sobresalen como aletas hacia la calle. Viéndolo en sección, el conjunto puede sugerir similitudes con las curvas intersectadas de las iglesias de Borromini, y las zigzagueantes escaleras en color blanco y negro del atrio en tres plantas recuerdan las Carceri d’invenzione de Piranesi, pero la sensación en su interior se aleja de la escala íntima de dichos antecedentes romanos, situándose más cerca de la amplitud y la libertad de las infraestructuras modernas. Llegando desde la Via Guido Reni, la visión de las bandas superpuestas de hormigón sugiere la comparación con la belleza inconsciente y sublime de los enlaces de autopistas...