Cuatro años ha durado el proceso de rehabilitación y ampliación del Museo San Telmo, que se acaba de inaugurar en San Sebastián. La intervención, de los madrileños Fuensanta Nieto y Enrique Sobejano, recupera el edificio original, un convento dominico construido en el siglo XVI —eliminando estructuras añadidas— y lo amplía con un nuevo pabellón. Los artistas guipuzcoanos Leopoldo Ferrán y Agustina Otero han colaborado en el diseño de un muro perforado que deja pasar la vegetación a fin de minimizar el impacto visual de la nueva construcción, situada bajo el monte Urgull.