La Biblioteca Municipal de Vipuri está hoy en la Unión Soviética. Cuando se terminó de construir en 1935 estaba en Finlandia (1). Alvar Aalto dedicó cinco años a la elaboración del proyecto y a su posterior edificación. Es un edificio de modestas dimensiones fuertemente investido, en la composición exterior de sus volúmenes, por la pátina del racionalismo. Sin embargo, este pequeño edificio se nos muestra hoy, indiscutiblemente, como el inicio de una arquitectura que ya aceptamos como finlandesa. Antes y después —Saarinen y Pietila, por ejemplo— ha dado Finlandia nombres muy significativos para la historia de la arquitectura de Europa, pero unos, los anteriores, parecían esperar el nacimiento de esta arquitectura «nacional», y otros, los posteriores, parece que intentan, a lo largo de su biografía profesional, mantener esas señas de identidad de las que ahora hablaremos...[+]