Ubicado en Chetian, una pequeña localidad del suroeste de China conocida por sus construcciones de piedra, el centro cultural se levanta con el objetivo de preservar el conocimiento ancestral y el legado histórico de la etnia Miao, una de las minorías más antiguas de China, cuya población se concentra fundamentalmente en la provincia de Guizhou.

La volumetría del edificio queda definida por muros de piedra de cuarenta centímetros de espesor construidos con piedra extraída de canteras locales, principalmente caliza y dolomita. Desafortunadamente, las técnicas constructivas tradicionales se perdieron con el paso del tiempo, por lo que hubo que llevar a cabo un cuidadoso estudio de las construcciones de piedra que aún permanecen en pie, con el objetivo de desarrollar un nuevo sistema de mampostería que combinara el saber vernáculo con las técnicas contemporáneas. A pesar de su aparente aspecto unitario, durante la construcción se sucedieron tres equipos locales dirigidos por sendos líderes, cada uno los cuales contaba con sus propias cuadrillas de artesanos y recurrió a diferentes técnicas de extracción, corte y puesta en obra de la piedra.

El empleo casi obsesivo de la piedra en el exterior, así como en el interior, da lugar a un edificio de carácter intimista, profundamente conectado con la singular historia material y cultural del lugar en el que se asienta.

Fotos: Jingsong Xie, Haobo Wei