
Tener una piscina propia puede transformar un hogar y un estilo de vida. Invertir en una piscina conlleva oportunidades y beneficios: puede revalorizar una propiedad y ofrecer bienestar, relajación y entretenimiento. Sin embargo, para llevar el proyecto a buen término, es necesaria una planificación cuidadosa, así como considerar una serie de aspectos clave, como la ubicación, el uso que se le dará, el tipo de obra a realizar y los materiales a emplear. También es fundamental tener en cuenta los gastos de mantenimiento y consideraciones en temas de seguridad.
A continuación, se presentan algunos aspectos generales a considerar en la proyección de una piscina en una vivienda, así como recomendaciones para poder disfrutarla con seguridad.
Tipos de construcción de piscinas
Existen diferentes tipos de piscinas según el sistema constructivo, los materiales y la estética deseada:
- Piscinas de obra: Permiten una alta personalización en forma, acabados y materiales. Son más duraderas y ofrecen infinitas posibilidades de diseño. El hormigón es el material más recomendado por su resistencia y longevidad.
- Piscinas prefabricadas: Fabricadas en poliéster o fibra de vidrio, se instalan rápidamente y son más económicas, aunque ofrecen opciones limitadas de personalización. Son ideales para presupuestos ajustados.
- Piscinas infinitas: Perfectas para terrenos con vistas, crean un efecto visual espectacular al hacer desaparecer visualmente el borde. El agua se desborda por uno o varios laterales creando una experiencia estética de lujo similar a la de un resort.
Planificación inicial: el paso más importante
Antes de iniciar cualquier construcción de piscinas, es fundamental definir claramente el uso principal que tendrá: ¿Será para nadar, relajarse o para el entretenimiento familiar? Esta decisión influirá en:
- El tamaño: desde piscinas compactas de 3x6 metros hasta más amplias de 6x12 metros o más longitud. La profundidad: 1,50 metros es aproximadamente la medida estándar, pero puede variar según el uso. Su forma: puede ser rectangular si se desea para nadar, en forma de riñón para ocio o formas personalizadas.
- Características especiales: Se pueden integrar una serie de accesorios y detalles como escaleras integradas, zona de spa, iluminación subacuática, entre otros.
Materiales para construir
Existen en el mercado una gran variedad de revestimientos que pueden adaptarse a diferentes estilos y preferencias:
- Gresite: Es un tipo de mosaico vítreo, resistente a la humedad, con infinitas posibilidades de diseño y es de fácil mantenimiento. A menudo se monta sobre una malla o lámina para que sea más fácil su instalación. Se recomienda para zonas de poca profundidad y escaleras. Se puede utilizar el gresite antideslizante que ofrece mayor seguridad.
- Arena de cuarzo: Este material crea una sensación de playa natural, ideal para diseños orgánicos con entrada gradual al agua.
- Liner de PVC: Lámina de calidad a base de PVC, es una opción económica y práctica para piscinas prefabricadas.
Ubicación, un factor clave
A la hora de elegir la ubicación es importante considerar:
- Orientación solar, es recomendable orientar la piscina hacia el sur para maximizar las horas de sol y aprovechar el calor natural, reduciendo costos de climatización.
- Características del terreno, es importante conocer las características, que el área sea plana y con espacio suficiente, que sea firme o permita una compactación adecuada.
- Distancia de elementos naturales: Es recomendable mantener la piscina alejada de árboles que puedan ensuciar el agua con hojas; también, para evitar que las raíces dañen la estructura.
- Privacidad: Es importante considerar la vista desde propiedades vecinas, de esta forma lograremos un equilibrio entre privacidad e integración con el jardín.
Permisos para construcción de piscinas
Es necesario gestionar una serie de licencias y normativas para la construcción de una piscina. Entre ellas, se pueden mencionar: la licencia de obra mayor, el proyecto técnico firmado por arquitecto, el cumplimiento de normativas locales, la declaración catastral, si es necesaria; así como la verificación de normativas de seguridad vigentes.
El proceso de construcción
El proceso de construcción se inicia con la excavación y preparación del terreno. Es necesario el marcado preciso del perímetro con estacas y cuerda; la excavación se realiza con maquinaria especializada, y tiene que tener varios centímetros adicionales para compensar el grosor del suelo; también es necesaria la verificación previa de tuberías y servicios subterráneos.
- Preparación de la base: Aplanado y nivelación del terreno; Compactación del suelo natural o relleno con áridos (granulometría 12-40 mm); así como aplicación de hormigón de limpieza de 5 cm para mejor trabajabilidad.
- Estructura de refuerzo: Colocación de mallazo de 8 mm o más en el suelo e instalación de varillas verticales para soporte de paredes. El espaciado del mallazo debe ser máximo 20x20 cm.
- Instalaciones técnicas: Fontanería: Instalación de tuberías de PVC de presión para entrada, salida y sistemas de filtración. Es crucial usar materiales de calidad y pegamento específico para PVC. Sistema eléctrico: Instalación de circuitos para iluminación subacuática y equipos de filtración. Debe realizarse por electricista certificado.
- Hormigonado: Uso de hormigón mínimo H-200, recomendado H-250; Adición de impermeabilizante (hidrófugo tipo Sika 1); Vertido del suelo y alisado con llanas y reglas; y construcción de paredes con bloques de hormigón o encofrado directo.
- Impermeabilización: Aplicación de mortero impermeabilizante flexible en todas las superficies. Este paso es crucial para evitar filtraciones futuras.
- Revestimiento y acabados finales: Para la instalación del revestimiento seleccionado es necesario prestar especial atención a la calidad de la instalación, para así poder garantizar durabilidad.
- Sistemas de filtración: agua siempre cristalina: Es muy importante tener el agua limpia, por lo que es necesario instalar: Filtros: Arena, vidrio o cartucho según tus necesidades; hacer desinfección: ya sea con cloración salina, UV o cloro tradicional. y por último, automatización: controladores de pH y cloro para menor mantenimiento.
- Sistemas de filtración: agua siempre cristalina: Es muy importante tener el agua limpia, por lo que es necesario instalar: Filtros: Arena, vidrio o cartucho según tus necesidades; hacer desinfección: ya sea con cloración salina, UV o cloro tradicional. y por último, Automatización: Controladores de pH y cloro para menor mantenimiento.
- Elementos de seguridad y confort: Bordes y coronación: Se recomienda la utilización de materiales antideslizantes y duraderos. Los bordes deben tener un ligero vuelo hacia el interior y estar ligeramente elevados para evitar que el agua sucia entre a la piscina. Escaleras: Pueden ser prefabricadas o construidas in situ. Para mayor seguridad, es importante contar con acabados antideslizantes. Iluminación: La iluminación subacuática no solo es estética, sino que mejora la seguridad para uso nocturno.
Mantenimiento y consideraciones a largo plazo
Una piscina, bien construida, requiere de un mantenimiento regular pero no excesivo. Entre los aspectos que hay que controlar: Control químico del agua (pH y desinfectante); limpieza regular de superficie y filtros; mantenimiento preventivo de equipos; así como una inspección periódica de revestimientos y juntas.
Construir una piscina es una decisión importante que requiere experiencia y conocimiento técnico. Contar con profesionales especializados que guíen desde el diseño hasta los acabados finales marca la diferencia entre un proyecto exitoso y uno con complicaciones. Con la planificación adecuada y el equipo correcto, el proyecto de piscina se convertirá en el corazón de tu hogar, un espacio donde crear recuerdos inolvidables con la familia y amistades.