Veinticinco años de experiencia en la producción de componentes metálicos y una búsqueda constante de crecimiento e innovación han situado a la empresa Jofebar en un lugar privilegiado en el mundo de la producción arquitectónica contemporánea.
Dos publicaciones recientes, una obra monográfica sobre el Centro Municipal de Exposiciones y Congresos de Ávila, de Francisco Mangado, y una colección de veinticinco obras realizadas en la Península Ibérica, documentan a través de las fotografías de Juan Rodríguez, planos y textos, la contribución de ciertos productos a la calidad constructiva.
La monografía sobre la obra de Mangado, presentada en un elegante envoltorio, anuncia a través de su imagen como objeto tridimensional, escultórico y monocromático, el carácter de su contenido. Los breves textos introductorios ofrecen información esencial sobre la biografía del autor del proyecto y el de las imágenes, y dejan intuir el papel atribuido a la documentación fotográfica artística, cuya plasticidad queda realzada por el formato en blanco y negro.
Buena parte de las imágenes describen la relación entre la obra y su contexto. Las fotografías, que destacan los diferentes tiempos de la obra contemporánea y de la ciudad amurallada histórica, también revelan la dimensión plástica del lugar y de la articulación volumétrica entre éste y el nuevo edificio. La relación interiorexterior queda enfatizada por amplias ventanas, ofreciendo una vasta gama de relaciones visuales con el casco antiguo. Las imágenes del interior se detienen para captar aspectos singulares del espacio mediante contrastes de luz: los revestimientos, la estereotomía o los ritmos de las estructuras de apoyo al sistema de iluminación artificial. El hecho de que en ninguna de las imágenes aparezcan indicios de su uso parece querer llamar la atención sobre la cualidad específica de la obra y sobre la autonomía del espacio arquitectónico en los aspectos espaciales y lumínicos. Los planos del proyecto, impresos en papel transparente, aluden a las dimensiones técnica y comunicativa del dibujo arquitectónico; podría decirse que a sus atribuciones clásicas. Esta representación resulta explicativa y al mismo tiempo ejemplar en su capacidad de establecer y examinar la diferencia entre el lenguaje específico de la imagen arquitectónica y la realidad interpretada por el filtro de la cámara del fotógrafo.
La segunda publicación, que recoge veinticinco obras realizadas en Portugal y España, es un testimonio de la atención prestada por Jofebar a la producción arquitectónica de calidad, en coherencia con la imagen de la empresa. Una selección que, junto a proyectos de figuras bien conocidas en el escenario internacional, sitúa obras excelentes de arquitectos jóvenes. Obras que son diversas tanto en tamaño como en tipo: casas unifamiliares, salas de exposición, museos y edificios públicos. Álvaro Siza, Rem Koolhaas, Eduardo Souto de Moura, Carlos Ferrater o Francisco Mangado son algunos de los autores presentes en esta edición.
Cada obra está ilustrada con bellísimas imágenes en blanco y negro tomadas por Juan Rodríguez, con fotografías impresas en grandes hojas desplegables a ambos lados. La documentación fotográfica se acompaña de textos descriptivos y de bocetos que, por estar ligados al proceso creativo, quedan subrayados mediante el único uso del color presente a lo largo de la publicación. Los planos, desde las planimetrías más generales hasta los detalles constructivos permiten, en un espacio gráfico de limitadas dimensiones, una buena comprensión de los diferentes proyectos.