1941-2020
El 23 de enero de 2020 falleció, a los 78 años, Adolfo Natalini, uno de los padres de la llamada ‘arquitectura radical’ y coautor de una de las visiones arquitectónicas más influyentes de la segunda mitad del siglo XX: el Monumento continuo. Formado en la Universidad de Florencia —donde acabó dando clases—, Natalini perteneció generacionalmente a los tiempos agitados y promisorios de la posmodernidad, y su crítica al legado de los grandes maestros como Le Corbusier, Mies o Gropius —y, sobre todo, al lenguaje convencional y puesto al servicio del poder en que había devenido el Movimiento Moderno— se transformó en un quehacer radical en su planteamiento utópico. Este se tradujo menos en edificios que en exposiciones, mobiliario, collages y fotomontajes donde la arquitectura se concibió como un lenguaje que trascendía las normas y cuyo objeto último era la comunicación social. En 1991, Natalini fundó su propio estudio y construyó algunos edificios, pero, al igual que ocurrió con otros arquitectos de vanguardia, el trabajo real del florentino palideció frente al poder hipnótico de los dibujos de Superstudio, aún hoy admirados por su sentido contrafáctico y su inquietante belleza.