Arte y cultura  Libros 

La voluntad artística

Álvaro Siza Vieira, Matosinhos (1933)

Luis Fernández-Galiano 
31/03/2018


Criado en un numeroso hogar de clase media presidido por la abuela, que regresó de Brasil a Portugal con sus hijos al quedar viuda, el joven Álvaro fue un precoz dibujante, estimulado por un tío suyo que incluso le animaba a firmar sus croquis. Estas dotes artísticas le hicieron concebir el proyecto de dedicarse a la escultura, un propósito recibido con recelo por el entorno familiar, y muy especialmente por su padre ingeniero, que temía la inseguridad económica inseparable de esa profesión, por lo que Siza se inscribió en la especialidad de Arquitectura de la Escuela de Bellas Artes con la esperanza de transitar en el futuro hacia lo que entonces entendía como su vocación. Pero la arquitectura acabó captando su interés, y en las aulas de la Escuela descubrió y fue descubierto por un profesor carismático y entusiasta, el culto y cosmopolita Fernando Távora, diez años mayor que él, y a cuyo estudio se incorporaría siendo todavía estudiante... [+]


Etiquetas incluidas: